¿Siempre que detectamos que nuestros hijos sufren celos con sus hermanos debemos plantearnos acudir a un psicólogo? Es importante conocer qué aspectos debemos tener en cuenta antes de acudir en Reus o en tu ciudad a un psicólogo para tratar los problemas de celos.
Los celos infantiles solemos considerarlos normales, como una respuesta a una situación que aparece en casa en un determinado momento. En principio, estos celos iniciales durarán un periodo concreto de tiempo, más o menos largo, pero tenderan a desaparecer.
Ahora bien, cuando estos celos se hacen permanentes, es cuando ya pasamos a tener unos celos patológicos y podrán tratarse con la ayuda de un psicólogo.
Existen algunas cosas que podemos hacer como familia para que, una vez aparezcan los celos o, por ejemplo, con la llegada de un hermanito o hermanita, estos celos se transformen en otra cosa y el niño o niña que los ha vivido tenga un buen aprendizaje vital.
Por un lado, debemos intentar evitar privilegios para unos y para otros no, evitar comparaciones o evitar expresiones o charlas con amigos, vecinos o conocidos comparando cada uno de los hijos.
Por otro lado, es importante favorecer la cooperación entre los hermanos, buscar espacio para todos en casa, para estar toda la familia junta, pero también para que cada uno de vuestros hijos tenga su espacio con papá y con mamá. No es necesario que sea algo muy especial, simplemente compartir un cuento, la ducha, ir a la compra o ayuda con los deberes, ayudará a que sientan que ellos per si solos son importantes para vosotros.
Además, y como aspecto general, también es importante poder comentar aspectos que os gusten de ellos, de las cosas que hacen o de lo que sentís por ellos, ya que el hecho de escucharlo refuerza ese sentimiento y es más difícil que se sientan desplazados por el hermano o que estan compitiendo por vuestro cariño y amor.
Por lo tanto, hay un abanico bastante grande de acciones que podéis hacer para que vuestros hijos se sientan bien consigo mismos, tengan una buena autoestima, entiendan su posición en la familia y disfruten compartiendo tiempo y espacio con sus hermanos.
Pero a veces no así de sencillo, a veces, ponemos en marcha todos estos recursos y no obtenemos la respuesta que esperamos de nuestros pequeños. En este caso, yo también os recomendaría una visita a un psicólogo ya que a veces, la ayuda profesional permite que con esas mismas acciones podáis llegar mejor a vuestros hijos y acabéis con los resultados que estáis buscando.
